¿Cómo ayuda la quiropráctica a los ancianos?

«La Quiropráctica da vida a sus años y años a su vida»

Nunca es tarde para empezar a sentirse más joven y en mejor forma. Como dice el refrán: «nunca es tarde cuando la dicha es buena»

El deterioro del cuerpo a través de los años es un proceso al que muchas personas se han resignado como «inevitable». Aunque el cuerpo cambie con el paso del tiempo, este proceso no debe ser negativo y mucho menos incapacitante; no hay que sufrir con, por ejemplo artrosis u osteoporosis, de una forma innecesaria, cuando hoy día sabemos que, con el cuidado adecuado, el organismo puede funcionar bien, retardar o disminuir su deterioro, protegerse de enfermedades y disfrutar de calidad de vida hasta muy avanzada edad.

La actividad física y una buena nutrición son factores imprescindibles para mantenerse sano; y también lo es mantener la columna vertebral sana, flexible, en buenas condiciones y como consecuencia, el sistema nervioso libre de interferencias. La Quiropráctica le puede ayudar con esto.

Si la columna vertebral pierde su flexibilidad, se deteriora a mayor velocidad; así que, a lo largo de los años, si no nos cuidamos, se puede desarrollar artrosis, cifosis y anquilosis en la columna. La Quiropráctica ayuda a mejorar el estado y flexibilidad de la columna vertebral y otras articulaciones, evitando, retardando o mejorando estas condiciones de una forma natural.

Los ajustes quiroprácticos ayudan a la nutrición de las células articulares y mantienen la integridad del sistema nervioso, disminuyen las interferencias en la comunicación neurológica y facilitan la salud de las articulaciones, tanto vertebrales como apendiculares. Así mismo fomentan el aumento de las defensas, lo cual ayuda al cuerpo a protegerse por sí mismo de manera natural sin recurrir a fármacos y sus dañinos efectos secundarios.

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Ajustes quiroprácticos para la tercera edad

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Con la quiropráctica, una persona en la tercera edad puede sentirte más vital, más flexible, con más salud; en otras palabras, puede mejorar la calidad de vida. Por eso, la Quiropráctica debe ser parte integral en el cuidado de su cuerpo.

Una de nuestros pacientes fue «desahuciada» por su traumatólogo, debido a que tenía una columna muy torcida y dañada, sentía mucho dolor y se movía con gran dificultad. Le fue dicha que tenía que llevar puesto un corsé rígido todo el tiempo, por el resto de su vida. Esta paciente no se resignó, sino que vino al Centro Quiropráctico Wellness; y después de un periodo de tiempo con ajustes (y sin usar el corsé) nos dijo que ¡¡¡había estado bailando en la fiesta de la boda de su nieta por varias horas!!! Estaba muy contenta, y nosotros también.

Una de las preocupaciones de ciertas personas es si los ajustes quiroprácticos pueden dañarles por tener los huesos frágiles. En el Centro Quiropráctico Wellness utilizamos técnicas quiroprácticas suaves, cuando es apropiado y necesario (por ejemplo el Activator), para evitar este tipo de riesgos.